jueves, 31 de marzo de 2011

Conclusiones de Paul Lafargue


CONCLUSIONES
«¿Qué puede salir de honorable de un negocio?» —exclama Cicerón—. «¿Y qué puede
producir de honesto el comercio? Todo lo que se llama negocio es indigno de un
hombre honrado... Los negociantes no pueden ganar sin mentir, y ¿qué hay más
vergonzoso que la mentira? Por lo tanto, es necesario considerar como algo bajo y vil el
oficio de todos los que venden su pena o su industria; puesto que cualquiera que cambie
su trabajo por dinero, se vende y se pone a nivel de los esclavos»

Proletarios embrutecidos por el dogma del trabajo, ¿oís el lenguaje de estos filósofos,
que se os oculta con un cuidado especial? Un ciudadano que da su trabajo por dinero se
degrada al nivel de los esclavos; comete un crimen que merece años de prisión.

La tartufería cristiana y el utilitarismo capitalista no habían pervertido a estos filósofos
de las Repúblicas antiguas, quienes, discurriendo como hombres libres, hablaban
ingenuamente de su pensamiento
Los romanos sólo conocían dos oficios nobles y libres: la agricultura y las armas. Todos
los ciudadanos vivían de derecho a expensas del tesoro, sin poder ser obligados a
proveer su subsistencia con ninguna de las
oficios, que estaban reservados únicamente para los esclavos. Cuando Bruto, el antiguo,
quiso levantar al pueblo, acusó sobre todo a Tarquino, el tirano, de haber convertido a
libres ciudadanos en artesanos y albañiles
Los filósofos antiguos se disputaban el origen de las ideas, pero estaban de acuerdo
cuando se trataba de aborrecer el trabajo. «La naturaleza —escribe Platón en su utopía
social, en su
ocupaciones degradan a los que las ejercen: viles mercenarios, miserables sin nombre,
que son excluidos por su mismo estado de los derechos políticos. En cuanto a los
negociantes, habituados a mentir y engañar, serán tolerados en la ciudad como un mal
necesario. El ciudadano que se degrada con los negocios comerciales debe ser castigado
por este delito. Si está convicto, será condenado a un año de prisión, y la pena será
doblada cada vez que reincida

«Pero —responderán los Bastiat, los Dupanloup
cristiano-capitalistas— esos pensadores, esos filósofos preconizaban la esclavitud».
Muy cierto, pero ¿podía ser de otra manera dadas las condiciones económicas y
políticas de su época? La guerra era el estado normal de las sociedades antiguas: el
hombre libre debía consagrar su tiempo a discutir las leyes del Estado y a velar por su
defensa. Los oficios eran entonces demasiado primitivos y groseros para poder cumplir,
ejercitándolos, con su propia misión de soldado y ciudadano.

Para tener guerreros y ciudadanos, los filósofos y los legisladores antiguos toleraban a
los esclavos en sus Repúblicas heroicas. Pero los moralistas y economistas del
capitalismo, ¿no preconizan el asalariado, la esclavitud moderna? Y ¿a quiénes otorga
ocios la esclavitud capitalista? A los Rothschild, a los Schneider, a las Madame
Boucicaut
«El prejuicio de la esclavitud dominaba el espíritu de Aristóteles y de Pitágoras», se ha
escrito desdeñosamente, y, sin embargo, Aristóteles pensaba que «si todo instrumento
pudiera ejecutar por sí solo su propia función, moviéndose por sí mismo, como las
cabezas de Dédalo o los trípodes de Vulcano, que se dedicaban espontáneamente a su
trabajo sagrado; si, por ejemplo, los husos de los tejedores tejieran por sí solos, ni el
maestro tendría necesidad de ayudantes, ni el patrono de esclavos».
El sueño de Aristóteles es nuestra realidad. Nuestras máquinas con aliento de fuego,
miembros de acero, infatigables, y de fecundidad maravillosa, inagotable, cumplen
dócilmente y por sí mismas su trabajo sagrado, y, a pesar de esto, el genio de los
grandes filósofos del capitalismo permanece dominado por el prejuicio del asalariado, la
peor de las esclavitudes. Aún no han alcanzado a comprender que la máquina es la
redentora de la humanidad, la diosa que rescatará al hombre de las
trabajo asalariado, la diosa que le dará ocios y libertad.

Il tempo è la moneta della tua vita.

È l'unica che possiedi e che puoi decidere come spendere.
Stai attento non permettere ad altri di usarla al tuo posto. Carl Sandburg
La comodita e il benessere giunto al lavaggio cerebrale propagandistico dei ultimi 25 anni deve avere fatto male . Incredibile ma vero

viernes, 25 de marzo de 2011

Frase celebre de Paul Lafarge 1848

«Trabajad, trabajad noche y día; trabajando, vosotros aumentáis vuestra miseria, y
vuestra miseria nos ahorra tener que imponeros el trabajo por la fuerza de las leyes. La
imposición legal del trabajo es demasiado penosa, exige demasiada violencia y hace
demasiado ruido; el hambre, por el contrario, es no solamente una presión pacífica,
silenciosa, incesante, sino que, siendo el móvil más natural del trabajo y de la industria,
provoca también los esfuerzos más potentes.»


Trabajad, trabajad, proletarios, para aumentar la fortuna social y vuestras miserias
individuales; trabajad, trabajad para que, haciéndoos cada vez más pobres, tengáis más
razón de trabajar y de ser miserables. Tal es la ley inexorable de la ...producción
capitalista.
 
«Los trabajadores, al cooperar con la acumulación de capitales productivos, contribuyen
por sí mismos al| acontecimiento que, tarde o temprano, deberá privarles de una parte de
sus salarios.»

Unos pasajes..

era el 1848 Paul Lafargue escribio': el gran problema de la producción capitalista no es ya el de encontrar
productores y de duplicar sus fuerzas, sino de descubrir consumidores, excitar sus
apetitos y crearles necesidades ficticias.

¡Todavia no a cambiado nada`en 200 años!
 


‎1848:En Lyon, en lugar de dejar a la fibra de la seda su pureza y su
flexibilidad natural, se la recarga de sales minerales que la hacen más pesada, mucho
más frágil y de menos uso. Todos nuestros productos son alterados a fin de facilitar s ...u
salida y abreviar su existencia.
 
en clave ironica:Estas falsificaciones, que tienen como única motivación un sentimiento humanitario,
pero que producen soberbias ganancias a los fabricantes que las practican, si bien son
desastrosas por la calidad de las mercancías y constit ...uyen una fuente inagotable del
derroche del trabajo humano, demuestran la ingeniosidad filantrópica de los burgueses y
la horrible perversión de los obreros que, por satisfacer su vicio por el trabajo, obligan a
los industriales a sofocar los gritos de su conciencia y a violar hasta las leyes de la
honradez comercial.
 
«Desde 1825, año en que estalló la primera crisis general, el mundo industrial y comercial, la producción
y el comercio de los pueblos civilizados y de sus anejos más o menos bárbaros, se deteriora cada diez
años aproximadamente. El comercio se detiene, los mercados están atestados, los productos son tan
abundantes como invendibles; la moneda se oculta, el crédito se desvanece, las fabricas se cierran, la
población obrera se encuentra desprovista de medios de subsistencia por haberlos producido antes en
exceso, las bancarrotas se suceden, lo mismo que las ventas a precios ínfimos. Durante años, se mantiene
este exceso de artículos, se desperdician o destruyen, en gran cantidad, las fuerzas productivas y los
productos sobrantes, hasta que desaparece el exceso de mercancías despreciadas y la producción y el
intercambio recuperan progresivamente su ritmo. Poco a poco, el crecimiento se acelera se pone al trote,
del trote industrial se pasa al galope y, por fin, al galope tendido de una carrera de obstáculos, en la que la
industria, el comercio, crédito y la especulación, después de los saltos más arriesgados, acaban en el
abismo de la crisis. Entonces, hay que volver a empezar. Hemos atravesado cinco crisis desde 1825 y
acabamos de salir de la sexta.

Paul Lafargue 1848 "El derecho a la pereza"

es un libro revelador aunque nunca hay q creer en algo sin haberlo cuestionado a fondo,, las cosas siempre son mas complejas de como las vemos o nos las enseñan ,,,,de todas formas creo en el balance y no en los extremos ,creo q siempre hay q buscar un centro entre los excesos de una y otra cosas,,,,,hoy por hoy desde hace siglos estamos viviendos los excesos!!!
Aqui' unos pasajes del libro ,pero si kereis leerlo todo ,abajo eta' el link
http://abriraqui.net/wp-content/uploads/2008/07/lafargue_refutacion_del_trabajo.pdf